Participaron en la investigación 136 personas que habían sufrido un ACV 6 meses antes. Los participantes asignados al grupo de práctica de tai chi chuan aprendieron una Forma corta que había demostrado resultados benéficos en enfermos de artritis. Las personas asignadas al grupo de control practicaron ejercicios de respiración, estiramiento, memorización y razonamiento.
Los pacientes del grupo de tai chi entrenaban en grupos reducidos, en una clase semanal coordinada por terapeutas y también 3 veces por semana individualmente en su hogar. El programa tuvo una duración de 12 semanas, pero en la octava semana los practicantes ya habían logrado aprender la Forma completa. El objetivo era lograr independencia en la práctica.
Se evaluó la habilidad de mantener el equilibrio mientras se cambiaba el peso de una pierna a otra y en distintas direcciones, como también el equilibrio estando parado en superficies con movilidad, por ejemplo un autobús. En estas pruebas el grupo de tai chi supero ampliamente al grupo de control en los resultados. “El grupo de tai chi demostró mejores condiciones en el control de su equilibrio. En sólo 6 semanas de práctica se evidenciaron mejoras muy significativas. La habilidad para cambiar el peso de una pierna a otra es muy importante ya que cualquier acción de alcanzar algo la requiere.” expresó uno de los investigadores.
Otros beneficios observados en los practicantes de tai chi fueron mayor fuerza y mejor acondicionamiento cardio-vascular. Las clases grupales también brindan una oportunidad de socializar con pares, evitando los costos de otras terapias.
Los resultados de esta investigación serán publicados en el próximo número del “Journal of Neurorehabilitation and Neural Repair”.
Artículo original:
“Stroke Survivors Improve Balance with Tai Chi”
University of Illinois at Chicago Office of Public Affairs
Tai Chi del Parque – Córdoba, Argentina – Instructora Marcela Thesz