Continuando un
poco el tema del artículo anterior, quisiera retomar el tema de las
necesidades.
Las necesidades
de nuestro cuerpo se suplen solamente tomando aquello que necesitamos. No podemos
reemplazar la solución con otra cosa.
Cuando tenemos
hambre, comemos. Cuando tenemos sed, tomamos agua. Entonces cuando estamos
cansados, descansamos.
Encuentro una
gran resistencia en nuestra sociedad occidental actual al simple hecho de
descansar. Pareciera que descansar no está bien visto… por supuesto, por uno
mismo.
Se confunde
(intencionalmente) cansancio físico con mental y se busca realizar actividades
que distiendan la mente. Una actividad lúdica u ociosa o aquella actividad que nos relaja
mentalmente, que nos da placer, no es sinónimo de descansar.
Caminar no es
descansar. Ir al campo no es descasar. Meditar no es descansar, hacer tai chi
tampoco. Leer un libro, se le acerca pero no es descansar. Estar con los hijos
y la familia… tampoco. Esa que estás pensando, que crees que es descansar, no
lo es.
Descansar es
descansar. Hay una sola forma de descansar y es estar tirado en la cama, en el sillón,
en la reposera, en el césped sin hacer nada, absolutamente nada. Así como que
te duermes una siestita. Eso es descansar. Físico 0% de actividad.
Hay una gran resistencia
mental propia a descansar. Es como si el cuerpo fuera siempre hiper-resistente
y nunca necesitara reposo. Incluso a la gente le cuesta reconocer que está
cansada. Les digo a mis alumnos “necesitas
descansar”, “si te duermes meditando es porque necesitas descansar”, “si la
clase te da sueño, vete a dormir luego” y me miran como si estuviera encarnando
al anticristo. Vade retro al descanso!
Para descansar
primero hay que reconocer que uno está cansado. Es reconocer el hecho y la
necesidad de que hay que frenar, dedicarse unos minutos a no hacer nada y
descansar. Y todos, absolutamente todos en algún momento de nuestra semana, de
nuestro día, nos sentimos cansados. Reconocer esa pequeña necesidad de
descansar unos minutos es ya un buen paso.
Así que, te
regalo un descanso. Por los próximos 8 minutos que dura el video que está
abajo, no hagas nada, escucha la música, quédate quieto, déjate ir… descansa.
Y para quienes
tienen Android en su tablet o celular, les recomiendo esta aplicación en Google
Play que está buena para escuchar sin hacer nada y jugar un rato con los
sonidos: Relax Melodies para el Sueño (gratis).