Una de las
técnicas más simples de chi kung es la llamada “Sonrisa Interior”.
Básicamente consiste
en sonreír al propio cuerpo. Sentados o acostados unos minutos, siguiendo la respiración
y llevando la atención a los órganos internos (de acuerdo a la teoría de la
medicina china, los zang-fu), sonreímos
al corazón, a los pulmones, al bazo, al hígado y a los riñones. Para cada sonrisa, ponemos las manos sobre el
cuerpo en la zona del órgano y nos deseamos la mejor salud y bienestar y le
agradecemos al órgano por su trabajo.
Esta práctica
básica se puede extender a cualquier parte del cuerpo: músculos, nervios, glándulas,
zonas con dolor, etc. Por ejemplo, podemos sonreír al sistema endócrino, pasando
por cada una de las glándulas del cuerpo; podemos sonreír a los huesos mas
importantes, no hace falta saber los nombres, sino poner las manos e
internamente llevar la energía de la sonrisa a la zona.
Beneficios de la sonrisa para la salud
“Desde el punto de vista de la salud, sonreír
ayuda a liberar tensiones y a alargar la vida. Además, al reírnos generamos una
importante oxigenación de los pulmones y ayudamos a desarrollar la actividad
cardiovascular. (…)
Cuando nos reímos, nuestro organismo segrega
endorfinas, elementos con gran poder analgésico y que ayudan a mitigar el
dolor. Por otra parte, también liberamos adrenalina (componente que incrementa
la creatividad y la imaginación), dopamina (que favorece la agilidad mental) y
serotonina (posee efectos calmantes y disminuye hambre y ansiedad).
La risa tiene un valor terapéutico muy importante.
Ayuda a disminuir el estrés y a tolerar mejor el dolor, previene patologías
como la depresión, activa el sistema inmunológico e incluso mejora el
cardiovascular.”
Fuente: http://bit.ly/1mSf4cI
La sonrisa
interior mejora la salud de los órganos y tejidos, favorece la regeneración celular
y la eliminación de toxinas. Par finalizar la práctica, sonreímos a todo el
cuerpo, llevando nuestros deseos de salud y bienestar a todo nuestro ser.
A sonreír!